lunes, 1 de marzo de 2021

¡Sálvame, Señor, y ten misericordia de mí!

Mensaje de cuaresma día 13. lunes 01.03.2021

Antífona: Sálvame, Señor, y ten misericordia de mí. Mi pie se mantiene en el camino recto, en la asamblea bendeciré al Señor.

Queridos hermanos y hermanas en Cristo: Que la gracia de Dios Padre misericordioso este con nosotros. Así sea

En este II lunes de cuaresma la primera lectura Daniel: 9, 4-10, nos invita a hacer un examen de conciencia frente a Dios, nuestro Padre Santo, a decirle como en el verso 5: "Nosotros hemos pecado, hemos cometido iniquidades, hemos sido malos, nos hemos rebelado y nos hemos apartado de tus mandamientos y de tus normas" y añadir el clamor del salmo 78: "No nos trates, Señor, como  merecen nuestros pecados", pero confiados en que Él escucha nuestro corazón humillado y contrito, y según el verso 9 :"De nuestro Dios, en cambio, es el tener misericordia y perdonar", dejarlo actuar en nuestra vida, es decir, dejar a Dios, ser Nuestro Dios.

Mientras que en el Santo Evangelio san Lucas: 6, 36-38, nos dice "En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Sean misericordiosos, como su Padre es misericordioso. No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados. Den y se les dará: recibirán una medida buena, bien sacudida, apretada y rebosante en los pliegues de su túnica. Porque con la misma medida con que midan, serán medidos". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús. 

Este Evangelio, muy cortito pero también muy fuerte, lo podríamos equiparar con el remedio que hace muchos años nos daban nuestros padres cuando teníamos parásitos intestinales, el aceite de ricino, una sola cucharada de este brebaje nos provocaba una terrible diarrea, nos caía pesado, generaba molestias y malestares en nuestro cuerpo, provoca nauseas y diarreas, pero al final, termina sanar nuestro organismo. 

En esencia: "sean misericordiosos, no juzguen y no serán juzgados", son palabras demasiado fuertes, que a veces te caen como la purga del aceite de ricino, pero si no las aceptas, no aprenderás a "ser perfecto". Fíjate y entiéndelo bien, "ser misericordioso" incluso con tu enemigo, con el que te hiere, con el que pretende quitarte tu trabajo, etc., no significa que estés a favor de la maldad que esta causando. Ten misericordia de la persona, pero no aceptes su maldad, su pecado. No juzgues, no critiques, y tener misericordia es "miser" y "corde", poner el corazón en la miseria, comenzando por tu miseria, después, poner el corazón en aquel que solo piensa en hacerte maldad, que es perverso. Porque tu no sabes lo que ha vivido en su vida para ser así, los maltratos y abusos que ha recibido y que le han generado ese resentimiento con la vida. Y aclarando amanece, no puedes mentirle y esconder su falta, no debes ser hipócrita, pero si vas a hablar con él y le vas a decir que está mal; ¿Cómo se lo vas a decir de manera que seas misericordioso?,¿te has puesto en su lugar?, ¿sabes si tiene el deseo de arrepentirse y necesita ayuda pero no sabe pedirla?. 

Critica el pecado, moléstate con el pecado, rechaza el pecado; pero NO juzgues a tus padres, a la prostituta, al homosexual, a la madre soltera, al drogadicto, al alcohólico, a tu hermano, a tu tío, a tu hijo, a tu esposo. Solo a Dios le pertenece el juicio, porque él es justo y misericordioso, pero nosotros no lo somos, así que dejemos de mandar al infierno a todo el que se nos ponga enfrente, porque tu enemigo es injusto, pero si juzgas, tú también lo serás y ¿de qué te servirá ir a Misa todos los domingos y comulgar? 


Padre justo y misericordioso, fortalece nuestros fieles corazones y afiánzalos
con la fuerza de tu gracia, para que seamos misericordiosos con nuestro prójimo y duros críticos y combativos del pecado. Amén

Todos te deben servir, Virgen y Madre de Dios, que siempre ruegas por nosotros, y tú nos haces vivir. Tanta fue tu perfección y de tanto merecer, que de ti quiso nacer quien Es nuestra redención. Amén.


II DOMINGO DE RESURRECCIÓN: "LA DIVINA MISERICORDÍA"

PASCUA: "Resurrexit sicut dixit, Alleluia". "Resucitó, como lo había dicho, Aleluya" . II DOMINGO DE RESURRECCIÓN: "...