sábado, 6 de marzo de 2021

Cuando manifieste en medio de ustedes mi santidad, y les infundiré un espíritu nuevo, dice el Señor.

 Mensaje de cuaresma día 19. domingo 07.03.2021

Antífona: Cuando manifieste en medio de ustedes mi santidad, los reuniré de todos los países; derramaré sobre ustedes agua pura y quedarán purificados de todos sus pecados, y les infundiré un espíritu nuevo, dice el Señor.

Queridos hermanos y hermanas en Cristo: El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones con el Espíritu Santo que se nos ha dado. Así sea.


En este domingo entramos a la III semana de cuaresma y en la primera lectura Del libro del Éxodo: 20, 1-17, Dios le da a Moisés los 10 mandamientos y la Ley mosaica, en donde el Señor hace del conocimiento de su pueblo de Israel, la forma en que quiere que se le rinda culto. En el Antiguo Testamento, el templo era el lugar de encuentro sublime con Dios. Ahora nosotros los Cristianos Católicos, sabemos que el lugar sublime de encuentro con Dios no es en el Templo físico, sino en la persona de Cristo, en la Eucaristía, que mora en los sagrarios de los templos.

En el Evangelio de hoy, según san Juan: 2, 13-25, podemos reflexionar que una de las palabras clave de esta cuaresma es la "purificación", En nuestros días está muy de moda esta palabra, que mucha gente la dice, pero pocos la usan, se habla de hacer un "detox", un "reset", un "reinicio", que son palabras para decir que vamos a sacar del cuerpo y del alma nuestras toxinas, lo que nos daña. Aquel templo, inicialmente construido para el culto a Dios, ahora era utilizado para hacer negocios, como un tianguis, porque al Templo no podía entrar el dinero pagano de los romanos, entonces los "cambistas lo canjeaban por dinero que sí podía entrar en el templo y en el canje, robaban, como ahora en algunas casas de cambio de dólares y con eso compraban animales para el sacrificio a Dios. Pues "afigurate" tu que Cristo se dió una enojada terrible al ver cómo profanaban la "casa de Su Padre" (así como pasa hoy con los que comulgan sin haberse confesado o estando peleados con un familiar o están a favor del aborto, como los que están criticando, comiendo, revisando o contestando su celular durante la Misa) y entonces decidió hacer un "detox" al lugar Santo.

Dios quiere que todos los "detox" de nuestra vida sucedan de buena manera, pero No siempre es así, mi mamá dice; "hijito: a la piedra, hay que darle con el martillo pa´ que afloje" todos los cambios suceden por las buenas. así San Pablo, que no se anda con rodeos y en su primera carta corintios: 1,22-25, el apóstol no predica a un Dios milagroso o sabio, no le habla al pueblo con palabras dulces e hipócritas para no herir su corazón. Predica a Cristo crucificado "escándalo para los judíos, (como ahora cuando solo esperamos bendiciones de Dios) y locura para los paganos (como esos ateos que dentro o fuera de la iglesia, no pueden entender que Cristo ofreció su vida al Padre y por nuestra salvación cargó con nuestros pecados).

Sí, te entiendo porque a mi tambien me pasa, es que hay cosas o situaciones del Evangelio o de la iglesia: que nos molestan, que nos caen como patada de mula en el estómago, que nos dan flojera, que nos dan pena, que no estamos de acuerdo. Pero es que, lo mismo sentirías tú si un día voy invitado a tu casa y apenas entro; dejo abierta la puerta y las llaves del agua, abro el refrigerador y me tomo lo que hay allí, enciendo la TV y todas las luces y las dejo encendidas aun siendo de día. ¿Cómo te sentirías?, ¿Qué me dirías?, ¿Qué harías conmigo?. Pues es lo mismo que sintió Cristo a ver a toda la gente "pasándose de lanza" y él  soporta demasiado de ti y de mi, tanto que a veces le colmamos la paciencia y se enoja mucho. Seguramente tu me reclamarías por lo que hice y no querrías volver a verme o mínimo, ya no me invitarías a tu casa. Cristo es como tu mamá y la mía; que se enoja, nos reclama y nos castiga para hacernos entender, pero es tanto su amor por nosotros que nos acepta de nuevo, que nos cuida, que nos protege y que nunca nos abandonaría.


Pidamos queridos hermanos y hermanas a Dios, que arranque de lo profundo de nuestras entrañas este corazón de piedra y por medio de uno o varios "detox", lo convierta en uno de carne, semejante al suyo. Amén.

ORACIÓN A SANTA MARIA

(L. de Grandmaison)

Santa María, Madre de Dios,
consérvame un corazón de niño,
puro y cristalino como una fuente.

Dame un corazón sencillo
que no saboree las tristezas;
un corazón grande para entregarse,
tierno en la compasión;
un corazón fiel y generoso
que no olvide ningún bien
ni guarde rencor por ningún mal.

Fórmame un corazón manso y humilde,
amante sin pedir retorno,
gozoso al desaparecer
en otro corazón ante tu divino Hijo;
un corazón grande e indomable
que con ninguna ingratitud se cierre,
que con ninguna indiferencia se canse;
un corazón atormentado por la gloria de Jesucristo,
herido de su amor, con herida que sólo se cure en el cielo.
Amén.





 

El Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y generoso para perdonar!

Mensaje de cuaresma día 18. sábado 06.03.2021


Antífona: El Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y generoso para perdonar. Bueno es el Señor para con todos y su amor se extiende a todas sus creaturas.

Queridos hermanos y hermanas en Cristo: Que la misericordia inagotable de El Padre amoroso, descienda sobre nuestros corazones y que durante este tiempo de preparación nos transforme para aprender a adorar al Padre en Espíritu y en Verdad. Así sea.

Estamos ya en el 3er. sábado de la II semana de cuaresma y en la primera lectura Del libro del profeta Miqueas: 7, 14-15. 18-20, el profeta nos recuerda que así sean grandes nuestros pecados o del color que sean, si nos arrepentimos y pedimos perdón, El Señor nos bañará en la Gracia de su misericordia, que es gratuita. De manera que sería conveniente que hicieras un examen de conciencia, un acto de contrición y te dispusieras a recibir esa misericordia mediante el Sacramento de la Reconciliación.


Mientras que en la lectura Del santo Evangelio Según San Lucas: 15,1-3.11-32, el mismo Cristo nos cuenta una de las parábolas más hermosas y más conocidas del Evangelio. La parábola del "hijo pródigo" o del "hijo mayor" o del "padre Misericordioso":

  • Por una parte el hijo menor, que cansado de las "exigencias" de su Padre le pide su parte de la herencia, se va y la malgasta hasta el punto de comer la comida de los cerdos. Reflexiona  y recuerda que los trabajadores y los criados de su Padre tienen mejor lugar en donde vivir y mejor comida y decide volver a casa. Hasta pensó en un discurso "Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, no merezco llamarme tu hijo, trátame como al último de tus criados".
Imagina por un momento como vestía y a qué olía este personaje; con la misma ropa desde hace no se cuantos días, la ropa en la Biblia es la manera de hablar de quién soy yo para otras personas. Este hombre comía entre los cerdos, como cuando estás entre personas que se conforman con lo poco que les dan sus dioses del dinero, del placer y del poder. Se conformaba con las bellotas que comía; como los que que les da lo mismo ir a Misa que no ir, que se conforman con la pobre comida chatarra; de los horóscopos, de la lectura de cartas, de la brujería, del mantra, de las "buenas vibras", de los decretos, que tu podrías decir, pero sabe buena la comida chatarra, pues a esí son las bellotas, pero, o engordas por exceso de calorías, grasas, sal y azúcar, o adelgazas por las enfermedades que causan.   
  • Del otro lado de la moneda, el hijo mayor, que como esta cerca de su Padre y que trabaja duro, lo ve como un negocio a largo plazo y piensa que merece todo, se siente irreprochable ante el Padre.
No se puede encontrar con la misericordia aquel que cree merecerlo todo, aquel orgulloso y soberbio. El encuentro con la misericordia parte del hecho de sentirse indigno. Como decía San Juan Pablo II, "si se pierde el sentido del pecado, se pierde el sentido de la gracia". Este hijo era como los que "sirven" a la iglesia; como los que dan temas de cuaresma, como los que tocan en Misa, como los que se confiesan, van a Misa todos los domingos y comulgan pero salen criticando qué los demás no hacen lo mismo.  
  • Por último, el Padre misericordioso, que ama sin medida y por igual y sus dos hijos: Con el primero se siente triste, a tal grado que todos los días espera su regreso. Sale también al encuentro del segundo cuando se entera que no quiere entrar a la fiesta de su hermano y perdonando sus reclamos, lo invita a participar.

Ahora bien, el Padre tuvo misericordia de su Hijo menor, pero también es justo y no permitiría un hijo inservible en su casa. Si nos fijamos bien, el Padre le puso sandalias en sus pies, signo de que seguiría solo los pasos que el Padre le indicara, luego una túnica blanca, es decir, perdonó a su hijo arrepentido y por último, el Padre le puso un anillo en el dedo, esto es símbolo del compromiso por ser recibido en casa. 

Estos tres regalos del Padre misericordioso son los que recibimos tu y yo cada vez que acudimos al Sacramento de la Reconciliación: Son también el boleto de entrada para disfrutar del Gran Banquete de la Eucaristía y representa un paso hacia adelante, en este peregrinar de nuestra vida hacia la vida eterna en la presencia de Dios. 

Padre todopoderoso, tan ancho que no puedo estar afuera de Él, que tu oído misericordioso esté abierto a la oración de quienes te suplicamos, y, para que recibamos lo que deseamos, concédenos pedir lo que te agrada. Amén.
 

Oh Virgen santísima,Madre de Dios,
Madre de Cristo,
Madre de la Iglesia,
míranos clemente en esta hora. 
Amén

 

II DOMINGO DE RESURRECCIÓN: "LA DIVINA MISERICORDÍA"

PASCUA: "Resurrexit sicut dixit, Alleluia". "Resucitó, como lo había dicho, Aleluya" . II DOMINGO DE RESURRECCIÓN: "...