Cuaresma: "Iesu, mitis et humilis corde, fac cor meum sicut tuum". "Jesús, manso y humilde de corazón. haz mi corazón semejante al tuyo" Mt. 11,29.
Del santo Evangelio según san Juan: 7, 40-53
- ¡Mamá, ¿me dejas cambiar eso?, es que no me gusta la música de tríos, a mi me gusta el pop, reggaetón y el perreo intenso!- ¿Has escuchado al menos una canción completa de trios?
- no, pero ni quiero, no me gustan.
En cuestiones musicales cada quien tiene su gusto, lo que es un hecho es que la música bien hecha y las canciones bien escritas, no pasan de modas, perduran a través del tiempo hasta convertirse en clásicos y traspasando incluso el genero original en el que fueron creados.
Bueno, pues en el evangelio de hoy, de San Juan por supuesto, no sabemos de qué estaba hablando Cristo, pero sí sabemos que muchos se interesaron en su plática, al grado de decir: "Éste es verdaderamente el profeta". Los sumos sacerdotes mandaron unos guardias a detenerlo, quienes después de escucharlo decidieron no aprenderlo; algo que suena lógico, porque es como si alguien te enseña a defenderte de algún ataque sorpresivo y tú, en lugar de agradecer, lo acusas de violencia y que te golpeó. Pues en este pasaje aquel tiempo, algunos fariseos y hoy en día muchos judíos no quieren siquiera oír hablar de Cristo.
Entonces las preguntas aquí son: ¿Qué tanto tiempo del día escuchas a Cristo a través de la oración, de la lectura del evangelio, ante su presencia en El Santísimo Sacramento, en la Santa Misa?, ¿Eres de los que llega; reza su Padre Nuestro, sus 3 Ave Marías y listo?, ¿Eres de los que le rezan un Santo Rosario completito de los 20 misterios, sin al menos quedarte 15 o 20 segundos en cada misterio, tratando de escuchar lo que te quiere decir?, ¿Eres de los que rechazan a Cristo cuando se mete en tu conciencia para impedir que hagas algo que sabes que estará mal, porque te estorba para tus fechorías?
El evangelio de hoy, Nicodemo nos invita a escuchar a Cristo: ¿Acaso nuestra ley condena a un hombre sin oírlo primero y sin averiguar lo que ha hecho?, asi que ¿Cómo sabes que no te gusta Cristo, la iglesia católica, la Santa Misa, si ni siquiera te acercas a escucharla con compromiso de aprender y con el corazón abierto?
No, no es tarde, nunca es tarde para para escuchar a Cristo y hacerle caso. Este tiempo de cuaresma es fundamental para los católicos, porque es una preparación para que reflexiones estas cosas en tu corazón, en tu razón, como la Virgen María, y lo expreses con palabras, pero sobre todo con tu actitud, con un cambio de vida. Cristo es Dios, no está equivocado, lo que te dice te lo dice por tu bien, aunque no te guste, porque Dios no es cuestión de gustos, como la música. Así que como dice el chavo del 8 en una canción: "Óyelo, escúchalo, está buscando amigos".
Pidámosle a María, La Santa Madre de Dios, que sea nuestra guía, nuestro ejemplo de cómo escuchar, seguir fielmente a Dios y, que por su poder de Madre interceda ante Cristo, el justo juez, para que siempre nos tenga paciencia y nos muestre su misericordia. Amén.