miércoles, 15 de diciembre de 2021

Miércoles III de Adviento: "No hay DIOS tan Grande como Tú"

ADVENITUS REDEMPTORIS. "y EL VERBO de hizo carne y habitó entre nosotros..." Jn 1, 14.  

Miércoles III de Adviento: "No hay DIOS tan Grande como Tú"

Del santo Evangelio según san Lucas: 7,19-23

En aquel tiempo, Juan envió a dos de sus discípulos a preguntar a Jesús: "¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?". Cuando llegaron a donde estaba Jesús, le dijeron: "Juan el Bautista nos ha mandado a preguntarte si eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro".
En aquel momento, Jesús curó a muchos de varias enfermedades y dolencias y de espíritus malignos, y a muchos ciegos les concedió la vista. Después contestó a los enviados: "Vayan a contarle a Juan lo que han visto y oído: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncia el Evangelio. Dichoso el que no se escandalice de mí".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Como ya reflexionamos anteriormente (lunes II Adviento), en este tiempo de Adviento, es el Profeta Isaías quien lleva "la pauta, la voz cantante", y hoy, desde la primera lectura, Dios todopoderoso manifiesta su grandeza y su poder: "Yo soy el Señor y no hay otro", y revela que todo lo que vemos y no vemos, lo que esté a nuestro alcance y lo que no, "POR ÉL ES". Y es esto mismo lo que nos manifiesta Cristo Dios en el evangelio, cuando le preguntan los enviados de Juan el Bautista: "¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?", y Nuestro Señor, responde contundentemente después de haber hecho muchos milagros; "Vayan a contarle a Juan lo que han visto y oído".

Todo para demostrar que Cristo es verdadero Dios y verdadero Hombre, que esta naturaleza es indivisible, es decir, que es un MISTERIO, que tu y yo no podemos definir dónde termina la parte divina y dónde comienza la humana, y en fin, que "Jesús se acercó a ellos y les habló así: «Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra." Mt. 28, 18.

En este tiempo de Adviento, estamos preparando nuestro corazón para celebrar el 25 de diciembre, que Cristo Nuestro Dios y Señor, por misericordia de Dios Padre y por la Acción de Dios Espíritu Santo, se ha encarnado en la criatura más bella, perfecta, sin mancha, mujer que aceptó que la voluntad de Dios se hiciera en ella al decir: FIAT= HÁGASE. Abriendo con esto el camino para que toda persona tenga acceso a la misericordia de Dios, a la Vida Eterna. Acércate pues a María Santísima en estos últimos días su embarazo verás que maravilla, que gozo es gozar de su compañía.


Bendita sea tu pureza

Bendita sea tu pureza
y eternamente lo sea,
pues todo un Dios se recrea
en tan graciosa belleza.
A ti, celestial princesa,
Virgen sagrada, María,
te ofrezco en este día
alma, vida y corazón.
¡Mírame con compasión!
¡No me dejes, Madre mía¡






martes, 14 de diciembre de 2021

Martes III de Adviento: "Hijo, ve HOY a trabajar en mi viña"

ADVENITUS REDEMPTORIS. "y EL VERBO de hizo carne y habitó entre nosotros..." Jn 1, 14.  

Martes III de Adviento: "Hijo, ve HOY a trabajar en mi viña"

Del santo Evangelio según san Mateo: 21, 28-32

Este día el evangelio nos presenta a un hombre que tenía dos hijos, le pide al primero que vaya HOY a trabajar a su campo y dice que sí, pero no va, después le pide al segundo que vaya y le dice que no va, pero al final se arrepiente y sí va a trabajar al campo de este hombre.

Hay mucha gente: ateos y aun católicos que dicen: "pues yo no mato, no robo, no ando en chismes, me porto bien, así que no necesito confesarme porque no tengo pecados", "yo no soy como esos pecadores", etc. Estos tales deberían bajarle muchas rayitas a su soberbia y a su orgullo, porque finalmente, si lo notas, no están haciendo nada, finalmente no hacen siquiera una obra de caridad, solo hablan y están poniendo su confianza en ellos mismos.

Esta podría ser la situación tuya o mía, te confiesas continuamente, vas a Misa, recibes la Santa Eucaristía, cantas la Misa, todo muy bonito y apenas sales de la casa de Dios te vamos a casa, viene una persona pudiendo ayuda, como diciéndote: hijo, ve HOY a trabajar a mis tierras, le dices sí, pero vas a la hora que te da la gana, de manera que para cuando llegas a ayudar ya otro hizo el favor que te habían pedido a ti. Esto no es ser Santo, esto es ser santurrón.

Por tu bien y para que puedas encontrar la misericordia de Dios, es necesario que aceptes que "estás regando el tepache", que eres limitado, que no lo sabes todo. Tu y yo somos miserables pecadores ante la presencia de Dios. Por eso dice al final el evangelio que los borrachos y las prostitutas se nos están adelantando, porque ellos se reconocen pecadores y pueden decir, "no creo en Dios", pero "sí van a trabajar sus tierras", es decir: visten al desnudo, atienden al enfermo, visitan al encarcelado, dan de comer al hambriento, etc., sí que nos llevan ventaja. 

Ahora bien, aclarando amanece, no esperes a ser ateo para trabajar en la viña de El Señor, porque es contradictorio, sino, en este tiempo de Adviento, pon tu confianza y tu atención en Dios y mira a tu alrededor todo el bien que puedes hacer a los que lo necesitan, y si quieres puedes decir cosas como esta: "Señor, no quiero hacer las paces con mi pariente", "Señor, no quiero cuidar a este enfermo", "Señor, no quiero trabajar hoy", "Señor, no quiero hacer tu voluntad", y después decir: "Señor no quiero... pero voy a cumplir tu voluntad y te ofrezco este esfuerzo".

Antífona: El que quiera venir conmigo, que renuncie a sí mismo, que tome su cruz y que me siga, dice el Señor.
ORACIÓN A LA VIRGEN

Oh María, sin pecado concebida
rogad por nosotros que recurrimos a Vos
sin tardanza pregona lengua mía
las glorias y alabanzas de María
atiende a mi socorro, gran Señora
y ampárame tu diestra protectora.

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, 
como era en un principio, sea ahora y siempre, 
por los siglos de los siglos. Amén.




lunes, 13 de diciembre de 2021

Lunes III de Adviento: Autoridad + convicción = Voluntad de Dios

ADVENITUS REDEMPTORIS. "y EL VERBO de hizo carne y habitó entre nosotros..." Jn 1, 14.  

Lunes III de Adviento: Autoridad + convicción = Voluntad de Dios   

Del santo Evangelio según san Mateo: 21, 23-27

Este día en el evangelio los sumos sacerdotes y los ancianos  le preguntan a Jesús: "¿Con qué derecho haces todas estas cosas? ¿Quién te ha dado semejante autoridad?".
Jesús les respondió con otra pregunta: ¿De dónde venía el bautismo de Juan, del cielo o de la tierra?".Ellos, después de pensar detenidamente eligieron decir: "No lo sabemos".
Y Jesús responde que tampoco el contestaría las preguntas que le hicieron.

Ellos querían quedar bien con el pueblo y demostrar que Cristo no tenía autoridad, porque si la tuvieran deberían haber contestado la pregunta de Jesús sin problemas, con esto, El Señor demostró que tenían autoridad, más no la CONVICCIÓN de ejercerla, eran como títeres, pues más que cumplir esta función según los criterios de Dios, decidían lo que les traía más popularidad entre el pueblo.    

Juan el bautista, el precursor de Cristo, vino al mundo a predicar la AUTORIDAD de Dios, denunciando el pecado e incitando al arrepentimiento. Por su parte, Cristo vino al mundo, apoyando el mensaje de Juan el Bautista, pero agregando CONVICCIÓN, es decir, aplicar a la AUTORIDAD DE DIOS, la gran misericordia que Él tiene por todos sus hijos. 

Entonces tenemos que para hacer la VOLUNTAD DE DIOS, es necesario que aceptes la autoridad de Dios sobre tu vida, la entiendas o no la entiendas, es decir, que no escondas tu pecado, que no seas cínico, descarado, pero también, que no te quedes estático en tu pecado pensando y mucho menos aceptando que no podrás salir nunca de el.

Cristo fundó su iglesia en Pedro, pero no solo le dio autoridad, jerarquía y convicción a Él y sus sucesores;  hay una línea de autoridad muy clara, que no ha sido interrumpida en más de dos mil años, hasta llegar a S.S. Francisco. Todas las decisiones oficiales que toma el Vicario de Cristo no están a discusión de nuestro gusto o disgusto, se consideran tomadas con asistencia del Espíritu Santo.

Entonces, si la iglesia dice que el aborto es un pecado mortal, es porque ya se analizó y así es, entonces, quien comete, promueve, aprueba leyes y ayuda a abortar, es pecador, pero además esta excomulgado, es decir, expulsado de la iglesia Católica, y aquí viene la convicción o misericordia de Dios, está en esta situación hasta en tanto no se arrepienta, confiese su pecado y prometa enmendarse y no volver a cometerlo.

Y así pasa con todos los pecados mortales, en los que no quedas excomulgado, pero si impedido para comulgar, hasta en tanto te te arrepientas, repares en lo posible tu pecado, te confieses y prometas no volver a hacerlo, como por ejemplo: 

  • Lujuria. si engañas a tu esposo, esposa, novio o novia, si miras pornografía y comentes actos deshonestos contra tu cuerpo. Pero también si miras con deseos impuros. 
  • Gula. si por comer en exceso, pero también por desperdiciar la comida o permitir que se eche a perder. También gula del alcohol, cuando tomas y tomas alcohol hasta perderte y no llevar dinero a tu casa porque te lo gastaste.
  • Pereza. si tienes talentos e insistes en no hacer nada con ellos, pero también utilizarlos para hacer trampa, maldad, corrupción, sacar ventaja.
  • Avaricia. Ser rico no es malo, pero eres avaro si obtienes tu dinero de fraudes, abusos de autoridad, corrupción, trabajos o bienes que inexistentes, pero también si te prestan algo y decides por tu cuenta quedártelo y no regresarlo. 
  • Y así, con todos los pecados capitales.
En este tiempo de Adviento, hazte acompañar por la Santísima Virgen María y pídele que te ayude, que te proteja, que te de fuerza de voluntad para superar tu pecado, ese que es complicado para ti, ese que ni tu mismo soportas, ese que se ha convertido en un vicio. Ella, sin duda te llevará a la presencia de Cristo, quien es el Camino, la Verdad y la Vida. Por los siglos de los siglos. Amén.

Antífona: Ven, Señor, a visitarnos con tu paz, para que nos alegremos delante de ti, de todo corazón.

  

domingo, 12 de diciembre de 2021

Domingo III de Adviento: ¿Cuix amo nican nica nimonantzin?

ADVENITUS REDEMPTORIS. "y EL VERBO de hizo carne y habitó entre nosotros..." Jn 1, 14.  

Domingo III de Adviento: ¿Cuix amo nican nica nimonantzin?  

Del santo Evangelio según san Lucas: 1, 39-48

La Virgen María se encaminó presurosa donde su prima Isabel, que estaba embarazada y la saludó, en cuanto escuchó el saludo, la criatura saltó en su seno e Isabel quedó llena del Espíritu Santo y exclamó: "¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a verme?

El acontecimiento Guadalupano lo podemos revisar desde la ciencia, desde la fe, desde la cultura, desde la historia, a la luz del pueblo de ese tiempo que estaba en necesidad del acompañamiento, cariño y la ternura del abrazo de una Madre.  

La imagen original de Guadalupe, no es una imagen, una foto, una pintura, ES UN CÓDICE, hay lenguaje, simbolismo que le llama la atención a los indígenas, que cuando lo ven, no ven una obra de arte, es un mensaje de esperanza de una Madre que viene a traer al verdadero Dios por quien se vive.

La Santísima Virgen de Guadalupe no habló en español, se presenta ante un indio y le habla en su idioma, el Náhuatl, su cabello peinado así significa que es virgen, pero el listón negro en su vientre significa que es Madre, de tal manera que cuando los indígenas la ven, saben que es virgen y madre, sus manos unidas en oración, una representa la raza indígena y la otra más blanca la raza europea, es decir, que ella quiere eliminar las diferencias entre ellas y unirlas. 

Es parte de la historia y hay que aceptar que los españoles, al conquistar América, impusieron muchas cosas, entre ellas la religión Católica a la fuerza, a punta de golpes, de espada y sangre, aunque estas acciones no se justifican, lo también cierto es que evitaron que siguieran sacrificando a los indígenas, incluyendo niños que, antes de su llegada habían sido ofrecidos por miles a estos dioses falsos . El hecho de que la Guadalupana quisiera poner su casa aquí en México, cambió la dureza y violencia de los españoles de imponer la fe, por la compasión: No temas esta enfermedad ni otra angustia, "Cuix amo nican nica nimonantzin?", es decir  "¿Qué no estoy yo aquí que soy tu madre?" 

En este tiempo de Adviento nuestra respuesta a la Guadalupana, deberían ser las palabras de Isabel, ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a verme? o la respuesta de Juan Diego. ”Señora mía, Niña, ya voy a realizar tu venerable aliento, tu venerable palabra; por ahora de Ti me aparto, yo, tu pobre indito”, haz este pequeño compromiso y Nuestra Madre del Tepeyac hará el resto.

Antífona: No ha hecho nada semejante con ningún otro pueblo; a ninguno le ha manifestado tan claramente su amor.

   

sábado, 11 de diciembre de 2021

ADVENITUS REDEMPTORIS. "y EL VERBO de hizo carne y habitó entre nosotros..." Jn 1, 14.  

Sábado II de Adviento: ¡Reconocer lo grande en lo pequeño! 

Del santo Evangelio según san Mateo: 17,10-13

En aquel tiempo, los discípulos le preguntaron a Jesús: "¿Por qué dicen los escribas que primero tiene que venir Elías?".
Él les respondió: "Ciertamente Elías ha de venir y lo pondrá todo en orden. Es más, yo les aseguro a ustedes que Elías ha venido ya, pero no lo reconocieron e hicieron con él cuanto les vino en gana. Del mismo modo, el Hijo del hombre va a padecer a manos de ellos".
Entonces entendieron los discípulos que les hablaba de Juan el Bautista. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

En el Antiguo Testamento, los profetas predicaban el reino de Dios con fuerza y firmeza, Elías no fue la excepción, diezmó a los Israelitas rebeldes a Dios, tres veces hizo llover fuego de lo alto y está escrito que volverá. Ahora en el evangelio Cristo hace comprender a sus discípulos que Elías ya vino con su espíritu y su poder en Juan el bautista y que "lo hicieron como les vino en gana".

Nunca me ha llamado mucho la atención apostar, aunque sí lo he hecho algunas veces en un juego de fútbol, con un billete de lotería, pronósticos, raspadito, y  me queda la sensación de que así somos con Dios. Apostamos a lo efímero, a lo pasajero. Pero Elías o Juan el bautista podrían decirte estas duras palabras: Si quieres tener un encuentro real y transformante con Dios, el Único, todo poderoso y lleno de misericordia, no puedes estar apostando a varios dioses, déjate de creer que tu puedes ser católico una semana y protestante la otra, déjate de estar pensando que tu puedes practicar yoga y oración al mismo tiempo, déjate de hacer que te lean las cartas y tu leer las cartas de San Pablo, deja de creer que tu puedes comulgar y luego hacer ritos en la el campo para que todo el "universo te colme", déjate ya de mentiras, déjate de ...tonterías (Elías le llamaría de otra forma).

"Quien no conoce a Dios, a cualquier santo le reza", El mundo está tan volteado de cabeza, tan lleno de maldad, tan light, que no distingue y todo lo quiere en "servicio Express, úsese y tírese" En Este tiempo de Adviento, "o eres frío o eres caliente, porque a los tibios los vomito" (Ap. 3,16), Dios detesta a los wevones, por eso la iglesia católica es la única que no te garantiza estar salvado, tienes que trabajar duro para ganarte el reino de Dios. La exigencia hace a muchos abandonarla, si eres católico y sigues aquí, tienes un punto a favor, ahora evita estas tentaciones, no te distraigas y toma el único camino que te lleva a Dios

Antífona: Pronto vendré y traeré conmigo la recompensa, dice el Señor, y daré a cada uno según sus obras.

SÚPLICA PARA TIEMPOS DIFÍCILES
(oración a la Virgen del Carmen)

Tengo mil dificultades: ayúdame.
De los enemigos del alma: sálvame.
En mis desaciertos: ilumíname.
En mis dudas y penas: confórtame.
En mis enfermedades: fortaléceme.
Cuando me desprecien: anímame.
En las tentaciones: defiéndeme.
En horas difíciles: consuélame.
Con tu corazón maternal: ámame.
Con tu inmenso poder: protégeme.
Y en tus brazos al expirar: recíbeme.
Virgen del Carmen, ruega por nosotros.

Amén.


viernes, 10 de diciembre de 2021

Viernes II de Adviento: ¡Revelándose a Dios por libre albedrío!

ADVENITUS REDEMPTORIS. "y EL VERBO de hizo carne y habitó entre nosotros..." Jn 1, 14.  

Viernes II de Adviento: ¡Revelándose a Dios por libre albedrío! 

Del santo Evangelio según san Mateo: 11, 16-19

Este día, desde la primera lectura Isaías 45, 17-19. (Lunes II de Adviento), Dios se manifiesta por boca del profeta y nos dice que Él ES el Señor, Nuestro Dios, el que nos manda lo que nos conviene y guía nuestro caminar, y luego nos reclama por desobedientes: "¡Ojalá hubieras obedecido mis mandatos! Sería tu paz como un río y tu justicia, como las olas del mar". Después, en el evangelio, es el mismo Cristo nos dice: "¿Con qué podré comparar a esta gente?", y después "Tocamos la flauta y no han bailado; cantamos canciones tristes y no han llorado" y todavía explica lo que quiso decir: "vino Juan, que ni comía ni bebía, y dijeron: 'Tiene un demonio'. Viene el Hijo del hombre, y dicen: Ése es un glotón y un borracho, amigo de publicanos y gente de mal vivir".

Es decir, las palabras de Juan el bautista eran duras y exigían mortificación y resistencia al pecado; arrepiéntete, allana tus caminos, derriba tus montes. Después llega Cristo y el mensaje es de misericordia; Ama a Dios sobre todas las cosas, bienaventurados los pobres de espíritu porque de ellos es el reino de los cielos, Ama a tu prójimo como a ti mismo, tus pecados están perdonados, etc.

Has de cuenta como cuando dices: "Este Padrecito no me gusta como hace la Misa, y te inventas cualquier justificación; es muy regañón, no le entiendo, es aburrido su sermón, está muy viejecito, es muy joven, hace la celebración muy larga, esta feo" y Dios nos podría decir a ti y a mi de dos formas: 

  1. Responder duro como lo haría Juan: "¿y a ti qué te importa cómo es al padrecito? Asistir y participar en Misa al menos los domingos y días festivos, es una obligación de todos los cristianos católicos (c.f. canon 2180 al 2185 del Catecismo de la Iglesia Católica) y no asistir a Misa en un pecado mortal grave.
  2. Responder con "yugo suave" como lo haría Cristo: El padrecito es un ser humano común, con virtudes y defectos, pecador como todos, pero llamado y ungido por mi para una importante misión. De manera que, así como tienes compasión contigo mismo y buscas la misericordia de mi, tu Dios y Señor, tenla para tu sacerdote, el que te sea asignado. Te aseguro que él esta luchando por no ser así, ¿qué tal si mejor les ayudas con una oración o te le echas la mano sirviendo a tu parroquia en un ministerio?
En estos tiempos; la tv, las redes sociales, los poderes políticos y económicos, el ateísmo, la new edge o mezcla de todo, nos has vendido la idea de que Dios no es importante, puedes llamarlo: universo, madre tierra, el creador y listo, y ser infiel, y si con otro pasas el rato, y si abortas, y si no te haces cargo de tu hijo, etc, todo esto no es pecado, son los "derechos del hombre y la mujer liberales"

En este tiempo de Adviento, debemos reflexionar a cerca de lo blandengues y rebeldes que somos ante lo que Dios nos pide, y que por el "libre albedrío" lo vemos relativo, sin chiste, pasado de moda, nos ofende. Elige entre Juan y Cristo la forma en que deseas recibir la Palabra de Dios. Mientras más te acerques a Cristo en la oración y los Sacramentos, más descubrirás en dónde estás "regando el tepache".

Antífona: Esperamos como salvador a Jesucristo, el Señor; él transformará nuestro cuerpo frágil en cuerpo glorioso como el suyo. 


Oración a María

Dulce Madre, no te alejes,
tu vista de mí no apartes,
ven conmigo a todas partes,
y solo nunca me dejes,
ya que nos proteges tanto,
haz que nos bendiga: 
El Padre, El Hijo y El Espíritu Santo

Amén.



jueves, 9 de diciembre de 2021

Jueves II de Adviento: ¡La gracia de Dios, sublime nivel!

ADVENITUS REDEMPTORIS. "y EL VERBO de hizo carne y habitó entre nosotros..." Jn 1, 14.  

Jueves II de Adviento: ¡La gracia de Dios, sublime nivel! 


Del santo Evangelio según san Mateo: 11, 11-15

En aquel tiempo, Jesús dijo a la gente: "Yo les aseguro que no ha surgido entre los hijos de una mujer ninguno más grande que Juan el Bautista. Sin embargo, el más pequeño en el Reino de los cielos, es todavía más grande que él.
Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el Reino de los cielos exige esfuerzo, y los esforzados lo conquistarán. Porque todos los profetas y la ley profetizaron, hasta Juan; y si quieren creerlo, él es Elías, el que habría de venir. El que tenga oídos que oiga". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

Primero Cristo dice que Juan es el más grande, pero luego dice que el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que él,  y ¿cómo así?, ¿cómo está eso?, vamos a ver: 

Lo que pasa es que Juan y todos los profetas que vivieron antes que él, tuvieron el favor de Dios por su esfuerzo, por su voluntad ferrea, por vencerse a si mismos, por su fe. Esto representaría digamos como un "nivel en el camino a la salvación". Ahora bien, una vez que vino Cristo, Él mismo comunicó que hay que seguir esforzándose por el reino de Dios, pero nos trajo otro nivel, el más sublime, LA GRACIA DE DIOS.

Por lo tanto, el nivel de Juan el Bautista, es el del puro esfuerzo, pero el nivel de Cristo es el nivel de la DONACIÓN, de recibir  LA GRACIA, GRACIA que nos transforma, porque si te acercas a Cristo la lucha sigue, pero ya no luchas tu solo, es Cristo quien lucha en ti y por ti, y por mi.

Y esta DONACIÓN es la clave, porqué:

  • ¿De que te sirve saber de memoria el Santo Rosario completito, si, apenas que terminas de rezarlo comienzas a difamar y hablar mal de la gente?
  • ¿De qué te sirve ser el mejor estudiante de la carrera, si usas este conocimiento para enaltecer tu orgullo, para humillar y para abusar de los que no conocen?
  • ¿De qué te sirve llegar a un puesto alto en tu trabajo, en la política, en tu grupo, si lo obtuviste con trampas, corrupción y tráfico de influencias?
  • ¿De qué te sirve tener hijos si los abortas o no te haces responsable de ellos?
Podríamos decir más, pero cada quien tiene cosas que debe superar, que debe vencer, aquí la pregunta es si te la vas a "rifar" solo o prefieres acercarte a Cristo y pedirle si GRACIA, pára que te vaya transformando, para que guíe tu proceso de conversión. Porque Juan no sabía esto de la GRACIA, pero tú si lo sabes. ¡Aprovéchalo a partir de este tiempo de Adviento!

Este día celebramos en la iglesia la memoria de San Juan Diego, quién podríamos decir que es como algo similar a Juan, pero para anunciar a la Madre de todos los mexicanos, la Santísima Virgen de Guadalupe y que quiso poner su casa aquí en Mexico, aprendamos del servicio misionero y humilde de este piadoso indio al ponerse en manos de La Morenita del Tepeyac.

Antífona: Yo les aseguro que todo lo que hicieron con uno de estos mis hermanos más pequeños, conmigo lo hicieron, dice el Señor.

Oración a la Virgen:
Augusta Reina de los Cielos y Señora de los Angeles, 
a Ti que has recibido de Dios el poder 
y la misión de aplastar la cabeza de Satanás, 
pedimos humildemente que envíes legiones celestiales
para que, bajo Tus ordenes, persigan a los demonios, 
los combatan por todas partes, repriman su audacia 
y los precipiten en los abismos.
Quien como Dios?
!Oh buena y tierna Madre, 
siempre serás nuestro amor y nuestra esperanza!
!Oh Divina Madre, 
envia a los Santos Ángeles para defenderme, 
y aleja de mi al cruel enemigo!
Santos Ángeles y Arcángeles defendednos y guardadnos.
Amén.


II DOMINGO DE RESURRECCIÓN: "LA DIVINA MISERICORDÍA"

PASCUA: "Resurrexit sicut dixit, Alleluia". "Resucitó, como lo había dicho, Aleluya" . II DOMINGO DE RESURRECCIÓN: "...